La ex participante de Gran Hermano 2023, Camila Lattanzio, se convirtió en protagonista de un escándalo que generó fuerte revuelo en redes sociales y medios de comunicación. En la madrugada del sábado, la influencer volcó su vehículo en la autopista Panamericana, a la altura del kilómetro 44,5 del ramal Pilar. Lo que comenzó como un siniestro vial terminó con una denuncia pública de comportamiento irresponsable y la resistencia de la joven a realizar el test de alcoholemia.
La información fue difundida por el programa LAM a través de su cuenta oficial de X (ex Twitter). Allí se detalló que Lattanzio se desmayó en dos oportunidades y que tuvo que ser asistida por su madre y su hermana, quienes llegaron al lugar tras el accidente. En el interior del automóvil se halló un vaso con vodka, lo que encendió aún más la polémica.
“Venía de un after”, aseguraron desde el entorno mediático. Las imágenes del vehículo, completamente volcado y con importantes daños, no tardaron en viralizarse, y muchos usuarios criticaron con dureza su actitud, acusándola de poner en peligro su vida y la de otros.
Camila fue trasladada al Hospital de Pilar, donde permanece internada, aunque fuera de peligro. Según las primeras pericias, habría perdido el control del auto, lo que provocó el despiste y el posterior impacto contra el guardarraíl.
Mientras tanto, la noticia continúa generando reacciones divididas entre quienes piden mayor responsabilidad a las figuras públicas y quienes destacan la importancia de que reciba asistencia psicológica ante lo que podría ser una señal de desborde emocional.
Este episodio pone nuevamente en debate el rol de los influencers y ex figuras de realities en la vida pública, y la responsabilidad que conlleva la exposición masiva.
