Un hallazgo inquietante sacudió la tranquilidad del barrio Antártida I, donde las autoridades encontraron proyectiles explosivos en el interior de una vivienda. El descubrimiento se produjo durante una inspección que terminó revelando la presencia de dos artefactos militares de gran calibre.
Uno de ellos se trata de un proyectil de mortero de 81 milímetros, que, si bien no contenía espoleta ni carga interna, representa un material sensible por su naturaleza. El otro, aún más preocupante, es un proyectil de artillería de 75 milímetros que sí conservaba una espoleta, aunque deteriorada, y carecía de carga explosiva o propulsora. Debido a su estado, este segundo elemento será sometido a pericias técnicas para evaluar el posible riesgo que podría haber implicado.
Afortunadamente, los artefactos fueron retirados del lugar sin que se registraran incidentes ni evacuaciones. No obstante, el hallazgo despertó alarma entre los vecinos y abrió una investigación para determinar cómo llegaron esos proyectiles a la vivienda y si representan un peligro mayor.
Las autoridades ya trabajan para esclarecer el origen del material y evitar que este tipo de situaciones se repitan, dado que su sola presencia en una zona urbana es motivo de gran preocupación.



